
Bienvenidos
Vivir con Sjögren
(o como yo lo llamo: A mí el Sjögren me la suda)

Porque resulta que también se puede vivir con una enfermedad autoinmune, reírse de lo absurdo y escribirle cartas al cuerpo sin volverse loca.
(O sí… pero loca de amor propio, que es mucho más divertido.)
Este blog no es médico.
Tampoco es trágico.
Es un espacio para contar lo que realmente pasa cuando el cuerpo empieza a hacer cosas raras, cuando te pierdes en la niebla mental o cuando te dicen “pero si te ves bien” mientras por dentro estás pidiendo auxilio.
Aquí comparto mi camino con el síndrome de Sjögren desde donde sé hacerlo:
📍 desde la psicología positiva
📍 desde el amor (propio y del bueno)
📍 y desde esa risa honesta que aparece cuando decidimos no tomarnos todo tan en serio (ni siquiera la enfermedad).
Porque la vida no viene en un solo tono.
A veces bailamos con luz…
y a veces con fatiga, ojos secos y un poquito de ironía.
Y aun así, bailamos.